domingo, 12 de agosto de 2018

Historias de un taxista y cena con los del seven (Ella)

01 Agosto de 2018




Hoy no fue el día que esperaba, más por las decisiones que tomé que por las situaciones en sí. En la oficina me moleste por un tema que ya me tenía harta, un compañero me exigía un estatus y mi gerente le apoyó en el mismo correo, cuando no era a mí a quien debía exigir tal respuesta. En fin, hable con mi gerente y le dije que ese tema ya me tenía hasta  el copete (expresión usada para decir que algo ya te tiene harto.) Luego me explicó la razón de su respuesta, y que no iba dirigido a mí sino a todos los involucrados porque ese tema también ya le tenía harto, lo entendí ya había pasado el bochorno de mi enojo.

Más tarde, aún no terminaba el día, cuando de nuevo me pasa un estrés y enojo a la vez. Tenía una cena con los amigos de mi novio y me equivoque de restaurante, llegue tarde, hice preocupar a mi novio y gaste $100 pesos más. Les platico… bueno espero alguien me lea, siempre que escribo pienso que hay alguien que podría interesarse, solo espero no aburrirte.

Eran las 6 de la tarde, pero mi novio  pasaría una hora más tarde por lo que tengo una hora libre entonces decido ir a un centro social donde puede haber clases de natación u otro tipo de actividad física que quiero tomar, está a 15 minutos de mi trabajo así que decidí caminar. Pensé que sería bueno después de estar casi todo el día sentada en la oficina. 

Llego al lugar, es el IMSS y en este tipo de centros es complicada la atención, pregunté por varias actividades pero la chica de recepción no tenía la información tan accesible, tenía que revisar un montón de papeles y parecía un poco harta, así que mejor me indico ir a una pizarra donde estaban los horarios, los cuales tampoco eran tan claros, las letras movidas, a unas palabras les faltaban letras y como pude lo descifre. No pude inscribirme por qué no traía toda la papelería completa y decidí volver la siguiente semana.

Salgo del lugar veo la hora y me doy cuenta de que ya casi serán las 7, así que mejor le mando un mensaje a mi novio diciendo que no pase por mí que lo veo directo en el restaurante. Yo tenía en mente que iríamos el centro de la ciudad y se me ocurrió que era más rápido llegar por mí misma en vez de hacer que mi novio se diera la vuelta meternos en el tráfico y luego tener que retornar, según mis cálculos quise evitar complicaciones.

El me insistió, dijo que ya casi salía pero insistí también que era más fácil que yo tomara un taxi. No sé diga más así quedamos. Tomé un taxi le dije que iba al centro Por supuesto nos topamos con tráfico, así que no Halle más que entablar conversación con el chofer, el inicio la plática. Típico de y ya salió del trabajo ¿Lista para descansar?  Y preguntas generales del calor, el tráfico, en base a eso rondaron las primeras preguntas.

Luego el señor tomo un poco más de confianza y pregunto  ¿el esposo ya la espera? Por unos segundos ¿pensé por qué? me pregunta directamente si existe un esposo, esta pregunta va más enfocada  a saber mi estado civil. ¿Querrá coquetear? 
Como sea, no quise  decir que soy soltera. Así que me invente una vida, le dije que si y que mi esposo me esperaba al lugar en el lugar al que íbamos. 
Y comento; Ah que bien, se ve usted muy joven ¿cuántos años tiene? 
27 años señor, se sorprendió y me dijo que me veía de menos edad Y pregunto ¿es usted secretaria o que estudio?
No sé por qué, cuando uso de vestir suelen decirme que parezco secretaria o que si trabajo en ello. No me molesta solo pienso ¿Será que hay un código de vestimenta único que hace reconocer a una Secretaria desde kilómetros?
Y le contesto, no señor soy de sistemas estudie Tecnologías de la información (TI).  Y dijo si ya se, eso es como computación verdad. Qué casualidad, yo tengo una hermana de su edad y ella estudio lo mismo que usted pero ella trabaja en una tienda de libros religiosos.  Y tengo otras dos hermanas, una es chef y la otra contadora Y entonces ¿cuántos años tiene de casada? Tengo 2 años señor, le informé.
Ok entonces se casó a los 25
Si, respondí. Volví al tema de la escuela ¿Y usted qué estudio? Señor. Y me explicó;
yo no pude estudiar, fíjese que mi padre se las veía difíciles cuando estábamos jóvenes, él no tenía para darnos estudios a todos así que desde que salí de la secundaria comencé a trabajar, tenía 14 años, inicie vendiendo chicles, gelatinas, frituras. Y así fui encontrando trabajos para ayudar un poco más a mi padre a sostener la familia.

Este señor me dijo que tenía 40 años,  tenía un poco de canas, vestía una camisa gris de manga 3/4 su forma de hablar a veces me parecía a un viejito pero su apariencia si era de 40, hablaba pausado y se notaba su interés por conocer y platicar de cosas de la vida. Lejos de lo que pensé al principio, creo que al igual que yo, no quería aburrirse en el tráfico.
El chófer siguió platicando sobre su vida laboral
Pero luego dijo algo que no concordó, que trabajo por alrededor de 5 años en oficina de su municipio y que le pagaban 150 por semana y a mí me pareció bastante bajo el sueldo, ni siquiera cubre un día de salario, para estos tiempos claro.
Luego explico que eso era cuando estaba aún adolescente y que solo hacia mandados (trabajos pequeños) ocasionalmente.

Luego comenzó a platicarme de su vida personal. Que era soltero y que vivía solo, tenía casa propia, que él hacía las labores propias de casa, como cocinar, lavar ropa etc., que jamás había estado con una mujer. 
¿Entonces usted siempre ha sido un hombre reservado con las mujeres?
Si, señorita pues ni si quiera novia he tenido a mis cuarenta años, entonces recordé la película de virgen a los 40  y casi se me escapaba la risa pero me mantuve. Dijo sentirse cómodo viviendo solo, era feliz y tranquilo, la que se sentía preocupado por él era su madre quien le dijo que se buscara a alguien para que cuando ella se fuera quedarse feliz de que alguien lo acompañaría.  Sin embargo  él no se sentía listo y aún no se animaba a hablarle a una mujer.

No supe que decir,  así que solo comenté que todos tenemos una vocación, tú eliges la soltería, el matrimonio, ser un religioso, ser quien sea que quieras ser, pero estar siempre seguro de tus convicciones y que no estaba mal no estar listo para lo que los demás dicen, tu solo debes estar seguro de saber que quieres hacer con tu vida y ser feliz.

Cierto, comento él, lo deje reflexionando, ya estábamos llegando al centro cuando recibí la llamada de mi novio, le respondo y me dice que si ya llegue, él está a pocos minutos, entonces me doy cuenta de que estoy yendo a la dirección contraria. ¡Oh por favor! me enojo conmigo misma ¿entonces no es en el centro? Le pregunto una vez más para confirmar, cuelgo y le digo  al taxista que me lleve al restaurante correcto, éste nota mi frustración pero no dice nada solo obedece mi petición, pasado mi enfado continuo con la plática con el taxista, le pregunto si ya terminará su jornada y comenta  que solo pasará por una señora quien es su cliente frecuente que vive por sus rumbos y luego iría a su casa.

Sin pedírselo, me platica de su cliente frecuente, es una señora que tiene una tienda de abarrotes y que a pesar de tener carro prefiere sus servicios ya que ella es algo meticulosa y siente que si anda en su propio auto la pueden robar o secuestrar. Algo de paranoia, razones tendrá. El punto es que cada viaje con ella se bien pagado $500 pesos y casi a diario pasa por ella.  Creo que este señor gana más que yo. 

Pasando a segundo tema, se me ocurre preguntar qué casos más raros le ha tocado en su vida laboral como taxista, y me responde fríamente con una frase ¨si le dijera, hay cosas que ni siquiera pueden contarse¨ 
Me deja intrigada, bueno platíqueme lo que se pueda contar.

Verá los casos raros que se me han presentado son más con las parejas.
¨En una esquina recojo a un par de hombres, uno luce muy normal, el otro muy macho, con botas, sombrero, bien fajado y presentable. Se suben a mi taxi y me indican los lleve a un bar,  apenas arranco y ellos comienzan a besarse, no puedo tolerar eso, no puedo llevarlo si no respetan mi taxi, ellos me refutan diciendo que no le han faltado el respeto y que además pagarían por ello, pero decido bajarlos¨.
Decidí no opinar y seguir escuchando sus casos.
¨El segundo caso fue de unas chicas lesbianas, lindas señorita, ellas también iban besándose pero no me di cuenta hasta que ya casi íbamos llegando a su destino. La sociedad ya está demasiado maleada, si supiera usted tanta cosa que se ve¨
¨Una vez llevé a un motel a un señor de aproximadamente 70 años y una jovencita de aproximadamente 20 años, los dejé a su destino y el caballero me pidió que pasara por ellos 2 horas más tarde, para eso me dio $700 pesos¨ y Pregunte ¿el caballero tenia apariencia de ser acaudalado?
¨Claro, pues cuando me pagó saco todo su dinero que de altura podría ser unos 10 centímetros¨
No opine al respecto, solo pensé que tal vez la chica haya tenido suerte con unos cuantos billetes. Siguió contando el taxista.
¨En otra ocasión recogí a las afueras de un motel a un joven de aproximadamente 18 años con una señora de unos 60 años, su lugar de destino parecía ser la casa del joven, solo él se bajó, la señora le dio unos billetes y le dijo toma guapo para que te compres los refrescos. Luego llevé a la señora a su casa. Tantas cosas que se ven en  esta vida¨
Creo el señor taxista no deja de sorprenderse de  lo que sucede en nuestra sociedad.
¨En otra ocasión una señora intento quitarme lo virgencito¨
Cuando dijo eso. Intente con todas mis ganas no reírme,  tal vez no me crean pero creo que en verdad este señor no ha estado con nadie, dada su inocencia y la forma en que observe que se sorprendía por llevar alguien  al motel o al verlos besarse…

Contó a una señora cincuentona que él no había estado con nadie y  ésta misma intento convencerlo a ir a un motel, ella muy segura le dijo que le enseñaría, que le trataría con cuidado y que le quitaría lo virgencito de una vez por todas, para que él se animara por fin el estar con alguien y conseguir una novia, no pude más y me reí,  que señora tan atrevida comente. El taxista comento lo mismo, si la señora estaba muy terca y me quería llevar pero le saque, no me deje.
Quería que me comentara más historias, pero ya habíamos llegado a mi destino,  le pague y agradecí al taxista.

Vi a mi novio y al mismo tiempo  veo a su amigo llegar junto con su novia, ella tan fresca como una lechuga y yo un poco abochornada, con la plática no me di cuenta de que no me había fijado en que me estaba despeinado, me sentía aún irritada, incomoda por todo lo que pase, mi novio intenta calmarme pero no supo que hacer solo me abraza, fue reconfortante pero aún no estaba tranquila. Salude a los amigos y entraron al restaurante yo me quede a fuera, arreglando un poco mi cabello con eso ya estoy mejor, entramos al lugar y con la plática me relajo un poco más y finalmente la cena, con eso ya soy feliz.

Y así las historias… Espero les haya gustado mis historias y las del taxista a quien espero volver a encontrarme para que termine de contarme sus casos raros  :P 

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